Los meteoritos metálicos o sideritos están formados básicamente por una aleación de hierro y níquel. Son los cuerpos celestes más raros y escasos que impactan sobre la superficie terrestre.
Este ejemplar, de 232 kg. de peso, es el más grande encontrado hasta ahora en el Norte de África, y probablemente formó parte del núcleo de un asteroide que cayó en 1936 en el Sahara Occidental. Esta pieza se encuentra expuesta en el Museo de la Naturaleza y el Hombre que, en la actualidad, cuenta con una de las mejores colecciones de meteoritos de España.
«Tras el cristal» surge con la idea de recuperar del olvido aquellas piezas que, en su momento, fueron seleccionadas para formar parte del libro “Tras el cristal. Una visión de los museos del Cabildo de Tenerife”.